Entre los tres y los cinco meses, tu bebé debería empezar a articular sonidos, básicamente vocálicos, y mostrar interés por comunicarse contigo. Hacia los seis meses ya dominará algunos sonidos consonánticos como «bah» 0 «gah ‘, y disfrutará poniendo a prueba sus pulmones. El desarrollo del lenguaje varía de un niño a otro, pero si a los cinco meses tu bebé no emite ningún ruidito, conviene que consultes al pediatra, porque podría ser un signo indicativo de problemas de audición.