La segunda ecografía se programa alrededor de la semana 20ª del embarazo y ofrece una información más detallada que la primera. Se podría decir que representa un auténtico «cuaderno de notas» en el que se reflejan todas las posibles anomalías del bebé.
Esta etapa del embarazo es la mejor para efectuar una ecografia con la máxima precisión diagnóstica porque el liquido amniótico es abundante y los sonidos pasan y se perciben mucho mejor ante la presencia de un medio acuoso.
- Pasa revista a todos los detalles referentes a la anatomía de tu futuro bebé, por segunda vez: el estado de su cráneo, la cara la columna vertebral, el tórax el abdomen, las piernas y los brazos.
Verifica las medidas de su nuca, del diámetro de su cabeza (que pasa a ser 5,4 centímetros) y de su perímetro (unos 20 centímetros). Asimismo, determina el perímetro del abdomen, la longitud del hueso de la pierna y la cadera y del fémur y de los pies (estas dos últimas medidas son generalmente idénticas: unos 38 milímetros), así como los huesos de su nariz.
- Establece el espacio interorbitario externo para asegurarse de que no existe ningún tipo de anomalía en el desarrollo de los ojos. La realización de esta ecografía es también la ocasión idónea para verificar que el cristalino ocular está bien formado.
- Revela la fecha de gestación del bebé y, por tanto, la aproximada de nacimiento. También determina la talla de su cerebelo, el cual debe ser igual al número de semanas de amenorrea, y que se sitúa en torno a unos 22 milímetros. También permite establecer su edad gestacional con mayor precisión que en la anterior revisión ecografica.
- Puede revelar el sexo del bebé, pues sus órganos genitales son bastante visibles y el margen de error es muy pequeño.
- Establece el correcto estado del desarrollo placentario y su relación con el bebé, y descarta también la existencia de cualquier obstáculo o anomalía derivada con la placenta: flujo sanguíneo, espesor de la placenta, volumen del liquido amniótico, estado del cordón umbilical. Para este examen suele emplearse la ecografia Doppler porque ofrece datos más concretos y visualiza los movimientos y chapoteos que provocan los movimientos del bebé dentro de su piscina intrauterina.
- Mide la vitalidad de tus pulsaciones sanguineas dentro de las arterias uterinas, lo que pone de manifiesto que éstas resultan saludables y resistentes para poder soportar el desarrollo del embarazo.
- Confirma las nuevas medidas de tu bebé cuyo cuerpo mide ahora unos 25 centímetros aproximadamente seis veces y media la talla de su fémur.