El uso de la anestesia epidural está hoy muy extendido en los partos. Si piensas optar por ella y quieres saber cómo te la pondrán, en qué casos no es posible administrarla, qué posibles efectos adversos puede tener o porqué a veces no hace efecto, sigue leyendo. Respondemos a todas tus dudas.
El dolor en el parto es hoy cosa del pasado. Gracias a la anestesia epidural (descubierta por un español, Fidel Pagel, en 1875) no hay ninguna necesidad de que la mujer cuando da a luz tenga que pasar por un calvario como antaño. A continuación te explicamos todo lo que te gustaría sor sobre esta anestesia, con la ayuda del doctor José horaria Calvo Vecino, jefe de Anestesiología y Reanimación del Hospital Infanta Leonor, de Madrid.
1. ¿CÓMO QUITA EL DOLOR?
La anestesia epidural se pone en la espalda con una aguja, pero tranquila: ese pinchazo no te dolerá, porque antes administran un anestésico local. La solución anestésica se inyecta en el espacio epidural, el que se encuentra antes de las cubiertas meníngeas que envuelven a la médula espinal, dentro de la columna vertebral.
Esa sustancia se distribuye por el espacio epidural e impregna las raíces nerviosas que salen desde la médula espinal y que son responsables de captar la sensibilidad y del movimiento desde el ombligo hasta los dedos de los pies. Según la cantidad de anestésico se pueden paralizar los movimientos de las extremidades inferiores del todo o sólo en parte. Como estos efectos desaparecen, el anestesista deja un pequeño tubo en el espacio epidural para administrar de forma continua el anestésico hasta que el parto acabe o más tiempo, si es necesario.
2. ¿CUANDO ME EA PONDRÁN?
En cualquier momento del parto, aunque se recomienda realizar una vez que se ha producido una dilatación de 3 o 4 cm. Esto ayuda a que la futura madre identifique entre una y otra contracción con y sin dolor. Esto es importante, porque el propósito de la analgesia es disminuir o abolir el dolor sin eliminar las contracciones que servirán para que la futura mamá ayude empujando con la pared abdominal a que su hijo salga.
3. ¿Y SI CUANDO LLEGO AL HOSPITAL YA TENGO VARIOS CENTÍMETROS DE DILATACION?
Si el trabajo de parto está muy avanzado o la dilatación es casi completa existen otras alternativas anestésicas de parecida técnica, como la anestesia intradural, que elimina por completo la sensibilidad y la movilidad. Consiste en una inyección con una aguja fina de una solución anestésica en el interior las membranas meníngeas, que se difunde por el líquido cefalorraquídeo, impregna las raíces nerviosas que allí se encuentran y elimina el dolor.
4. ¿PODRÉ SENTIR LAS CONTRACCIONES?
Generalmente sí, pero a veces no es posible disminuir la sensibilidad dolorosa sin disminuir al mismo tiempo la movilidad de los músculos a causa de la susceptibilidad individual de cada persona a la solución anestésica. Hay mujeres en las que el efecto es mayor que en otras.
5. ¿Cuándo no se debe poner?
Cuando la mujer sufre enfermedades del sistema nervioso central o en la médula espinal, si tiene alteraciones en la coagulación de la sangre, enfermedades sistémicas graves… Muchas de estas enfermedades no constituyen una contraindicación, pero la administración de anestesia puede agravarlas. Por eso, los anestesiólogos deben valorar antes cada caso en particular. En el caso de las mujeres con tatuajes en la espalda implica una complejidad añadida y es el anestesiológo quien debe decidir.
6. HACE QUE EL PARTO SEA MÁS LENTO?
Entre los primeros 30 y 45 minutos el parto se ralentiza un poco, pero una vez que el dolor desaparece, el desarrollo del parto es más fluido, fácil y rápido. No obstante, no hay que olvidar que en una mujer sana que da a luz por primera vez se estima que el parto dura unas 12 horas, desde su comienzo hasta que nace el niño.
7. ¿AUMENTA LAS CESÁREAS Y LOS PARTOS INSTRUMENTALES?
Está demostrado que la frecuencia de cesáreas con o sin epidural es la misma, entre el 15 y el 20 por ciento dolos partos. En cuanto al número de partos instrumentales no existe evidencia científica de que aumenten con la analgesia epidural y tampoco hay razones fisiológicas, anatómicas o físicas que la sustenten.
8. ¿POR QUÉ NO SIEMPRE HACE EFECTO?
La analgesia epidural se administra «a ciegas»: el anestesista busca el espacio epidural con una técnica llamada «búsqueda de la pérdida de resistencia». Es decir, son su tacto y experiencia los que le dicen que se encuentra en el lugar adecuado. Esto supone que haya casos en los que la solución anestésica no se deposite en el espacio epidural, cuya anchura es de 2 a 3 mm. Esto es muy raro y, cuando ocurre, generalmente se debe a que la mujer tiene algunas estructuras anatómicas alteradas, como escoliosis. De todas formas, si se dispone de tiempo y no hay contraindicaciones, se puede repetir.
9. ¿QUE EFECTOS ADVERSOS PUEDE TENER?
El más frecuente es la «cefalea postpunción dural»Al tratarse de una punción ‘la ciegas», la aguja puede pasar más allá del espacio epidural y puncionar la membrana meníngea, con lo que se produce un pequeño orificio que permite la salida de liquido cefalorraquídeo. Esta pérdida de líquido provoca en algunos casos un intenso dolor de cabeza, que aumenta con los movimientos de la cabeza. Se puede tratar con analgésicos y reposo. Suele desaparecer en tres días.
También, a veces tras la administración de la analgesia epidural se produce una calda de la tensión arterial y la frecuencia del pulso, con sensación de mareo, náusea y sudoración. Es pasajero y se puede tratar.
- Otro efecto que aparece con relativa frecuencia es la disminución de la sensibilidad en el tórax e inclusa brazos. Es molesto, pero desaparece en poco tiempo
- Se puede producir la punción de un vaso sango de la meninge e introducir el anestésico en esos c partimentos y provocar una intoxicación. Para evitar, siempre se aplica una pequeña dosis de prueba y hay efectos adversos, se administra la dosis neceó
10. ¿Y SI HAY SUFRIMIENTO FETAL?
Ante la sospecha de sufrimiento fetal, conviene realizar otras técnicas anestésicas más rápidas, como la anestesia intradural o incluso la anestesia general caso de cesárea para que el ginecólogo pueda reí operación lo antes posible.
LA OPINIÓN DEL EXPERTO La consulta preanestésica
Es recomendable acudir a la consulta preanestésica en todos aquellos casos en los que se con enfermedad sistémica previa. Aunque deberían realizarse un contacto previo con un anestesilógico todos los casos, lamentablemente, no se dispone en ningún país del número total necesario de especialistas en anestesia para poder atender a todas las mujeres embarazadas. Como en principio, gestante no es sinónimo de enferma, es recomendable una atención personalizada en los servicios de Anestesia de los hospitales sólo aquellos casos que la gestación presente problemas médicos añadidos o haya conocimos de enfermedad asociadas.